Todas las Noticias

21 de marzo de 2016

Lo que viene


Soledades



  La soledad es un sentimiento raro, fastidioso, molesto. Me refiero a la soledad que se siente como un peso agobiante. Esa que se percibe rodeado de personas. 

  Te ha pasado sentirte sola, aunque no estés físicamente sola? Seguro que sí. Has sentido soledad en el momento de tomar decisiones, o tal vez ante circunstancias difíciles en que no encontrabas la salida? Casi seguro que sí. 

  Dejame decirte ¡que no te pasa solo a vos! Muchos hemos pasado por eso. En todo el mundo, en todas las culturas… Y es casi inevitable. Incluso es prácticamente necesario. Sí, necesario para darnos cuenta de que hay Alguien que siempre está. En esos momentos de soledad podés hablar con Dios, y vas a darte cuenta de que Él siempre está. Atento, siempre mirando, y sabiendo todos los detalles, siempre. Y Él no te dejará. Jamás. 

  Somos seres que necesitan compañía. No fuimos creados para vivir en la independencia total, solos, aislados. Dios lo sabe. Y prometió estar con nosotros todos los días de nuestra vida. Él siempre está para ayudarnos, guiarnos, y decirnos cómo decidir lo mejor. 

  En esos momentos de soledad podés hablar con Dios y contarle todo lo que quieras, pedirle su ayuda, incluso pasar tiempo simplemente en su compañía. ¡Vas a ver que todo resultará sumamente bueno! No solo recibirás la ayuda de Dios, sino dirección, consejo, consuelo, compañía, su amor y nuevas fuerzas!

  No trates de huir de esos momentos de soledad que se nos cruzan de vez en cuando. ¡Seguramente tienen un propósito! Descanso, examinarnos a nosotros mismos, analizar las circunstancias para buscar la mejor decisión a tomar, un consejo de parte de Dios, o quizás simplemente el propósito sea que puedas ver que contás con Dios, una compañía única, el mejor consejero, el mejor amigo, el Padre Perfecto que puede comprenderte y darte lo mejor. ¡Nunca estamos solos! Él siempre está con nosotros.